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dimecres, 1 de juny del 2011

ABORDATGE EMOCIONAL DES DE LA PSICOMOTRICITAT RELACIONAL

Ponent: Arantxa Irastorza Zulaica
Sobre la ponent: Arantxa Irastorza és mare de dues filles, Karmen i Ixebel, és Llicenciada en Ciències de l'Educació (Pedagogia) i ha estat formada en psicomotricitat relacional per André Lapierre i Núria Franc. Té més de 20 anys d'experiència en l'àmbit preventiu, treballant amb nens, així com també amb pares i mares interessats en comprendre i acompanyar als seus fills/es en el seu desenvolupament evolutiu. Ha desenvolupat la seva tasca professional, principalment al País Valencià i el País Basc.
Sobre la conferència:
La Psicomotricitat Relacional entén que és la RELACIÓ el que vehicula la construcció de la identitat humana, en els aspectes psico-afectius emocionals i físics. Això es produeix en els primers anys de la vida en funció de la relació viscuda, amb els adults que el sostenen. Aquest procés de vida donarà lloc a la construcció de la personalitat més o menys equilibrada, si fa no "normal" o patològica.
Donada la immaduresa biològica de l'ésser humà, aquest procés es realitza en el contacte CORPORAL adult-nadó, en un llenguatge TÒNIC-CORPORAL, on tota la comunicació s'estableix en el cos. El cos és el lloc únic, sagrat, on es viu tota la sensibilitat: l'afectivitat, l'emoció, la relació amb un mateix i amb l'altre, lloc de plaer, de desig, de frustració i d'angoixa. En definitiva, lloc de record de totes les emocions viscudes per la criatura, en la seva relació amb els i les altres particularment amb les figures parentals i els seus substituts (adult). La Psicomotricitat relacional és una eina de treball que ens possibilita establir la comunicació des del codi natural i propi dels infants: l'activitat i el joc espontani. En aquest llenguatge, els i les infants transmeten els desitjos, necessitats i conflictes que estan vivint. És a dir, tot el que passa en el cos. L'abordatge d'aquesta comunicació, atenent a les necessitats concretes de cada infant i el seu moment evolutiu particular es realitzarà des de la implicació i disponibilitat corporal de l'adult.
Aquesta comunicació corporal, que precedeix al llenguatge oral, es compon de mediadors de la relació com el to amb el qual establim els contactes, la postura, veu, la mirada, el gest, el somriure, paraules, etc. On l'escolta d'un mateix / i de l'altre, adquireixen una importància cabdal en l'acte educatiu i la comunicació adult-infant.



dijous, 14 d’abril del 2011

RECOMANO

Diversos llibres de l'Editorial Octaedro que fan reflexionar sobre els ritmes de la infància, la llibertat (tant en el moviment con en l'aprenentatge) i que ens poden ajudar a entendre millor als nens i a les nenes, així com a arribar a trobar el camí cap a una educació lliure.





OBSERVAR A UN NIÑO CON PAZ Y TRANQUILIDAD ES LO QUE MÁS ENSEÑA

Habló ayer en los Cursos de Verano sobre la experiencia de la pediatra Emmi Pikler en un orfanato de Budapest. Teresa Godall Maestra y pediatra

07.07.10 
 
Volver a los orígenes y observar al bebé con paz y tranquilidad es la mejor manera de ayudarle a avanzar. Lo dice Teresa Godall, profesora de Facultad de Formación del Profesorado de la Universidad de Barcelona y especialista en las investigaciones de la pediatra húngara Emmi Pikler. Participa en el Curso de Verano 'Aportaciones y claves de la movilidad propia de los niños entre 0 y 3 años', que se desarrolla en euskera con un gran éxito de asistencia. 
 
-¿Por qué es tan importante observar a un bebé?
-Es así como descubrimos qué saben hacer y qué necesitan. Estamos tan habituados a pensar que los niños no saben decirnos lo que les pasa, que no les miramos. Pero en el momento en que lo hacemos o leemos a quienes les han observado, descubrimos sus personalidades, sus maneras de ser y sus características. 
 
-¿Hablamos de formas de ser particulares o generales?
-Existen unas características de la primera infancia que Emmi Pikler, pediatra húngara en la que me he especializado, ha descrito por primera vez como universales. Pero ella también nos dice que existen caracteres corporales y maneras de hacer y procedimientos muy diversos en cada niño y niña. 
 
-Emmi Pikler, ¿una investigadora avanzada?
-Nacida en 1902, investigó y aprendió desde la Medicina, el Psicoanálisis y las técnicas educativas y de conciencia sensorial del momento, dentro de la revolución cultural de la primera mitad del siglo XX. Describió todo el sistema de desarrollo motor autónomo del bebé: cómo debemos educar y tratar a los niños para que evolucionen de forma sana, sin enfermedades y sin accidentes. 
 
-¿Cómo llegó Pikler a sus estas conclusiones?
-A raíz de publicar su tesis y no ser reconocida su aportación, se hizo cargo de un orfanato, donde estableció las condiciones necesarias para comprobar sus teorías. Estudió el vínculo afectivo y desarrolló un sistema de cuidados para establecer una buena relación con los bebés, observarlos bien y dejarles moverse en libertad para que aprendan por sí mismos. 
 
-¿Cuál fue su aportación radical?
-Apostó por el desarrollo motor autónomo. El niño puede aprender por sí mismo si los entornos son adecuados. Organizó un sistema de cuidados que evitaba los síndromes de hospitalismo o institucionalización. Los niños y niñas del orfanato conseguían tener una vida social y familiar óptima. Su doble aportación fue en temas de motricidad y en la relación afectiva adulto-bebé. 
 
-¿Qué es lo más importante para el desarrollo óptimo del bebé?
-Aparentemente todo está muy investigado. Existe una gran tecnología de la infancia, que va desde el mobiliario a los juguetes para estimular. Y observamos que el aspecto más individual y específico de cada niño, así como el relacional o vincular, no siempre está bien resuelto. Por desgracia, cada vez vemos más fenómenos de violencia en las familias y entre los niños. Con tanto cariño que les damos, proyectamos nuestras expectativas y deseos y no observamos o no vemos esa maravilla de individualidad, esa persona que se muestra y debemos entender para darle una buena respuesta. 
 
-¿Fallamos en cuestión de apego y vínculos?
-Las familias, cada vez más, sienten cansancio, el estrés del trabajo. Hay una gran expectativa porque algunas madres son mayores, tienen formación y cultura y quieren hacerlo bien. Y hay una exigencia tan enorme que va en contra de una relación tranquila, espontánea y relajada. Si un niño a los 15 meses no anda, madres, padres, maestros y pediatras imponen sus fórmulas e impiden un desarrollo a su ritmo. 
 
-Propone volver al origen...
-Sí, a la Biología. Hay que escuchar al cuerpo y dar condiciones sanas. Hay que buscar en lo cotidiano, donde está esa sabiduría. Aprender a mirar es difícil porque hay que eliminar estereotipos. 
 
-Se mencionan los estudios de etología a la hora de mirar al bebé.
-Emmi Pikler investigó antropológicamente y en la etología. Vió tribus de cazadores que dejaban mucho margen a los niños. No permitían que las madres ayudaran o amamantaran a otros niños. En tribus más agrícolas había más relación de cuidados. Ella se preguntó: '¿Queremos niños agresivos y competitivos -los cazadores- o niños que creen en el compartir y el confiar?' A través de sus estudios interdisciplinares elaboró una ética de cómo tratarles. 
 
-Con nuestros mimos al bebé no nos parecemos a las sociedades de cazadores...
-Pero hay una exigencia, una ambigüedad. Le cuido, le quiero y le abrazaría todo el día, pero cuando no responde exactamente a las expectativas de los libros, o sale temerario, movido o llorón se rompen las buenas voluntades y aparecen grandes contradicciones. 
 
-La escala de la motricidad de Pikler descubre posiciones intermedias...
-No hablamos de estar tumbado, sentado o de pie, sino de posiciones bisagra que ella describe. Son fundamentales para que los niños aprendan a sentarse, levantarse o gatear por sí mismos. Sin ellas, los sentamos y esperamos a sus propios desplazamientos. Todo el mundo conoce el gateo pero hay otras menos conocidas: las de costado, recostado, semisentado o una posición de cuadrupedia que se llama 'del oso'. Cuando se deja libertad en estas posiciones aparecen en un mismo niño hasta 10 ó 12 modos diferentes de sentarse. Estas posiciones permiten una gran flexibilidad y disponibilidad corporal. 
 
-Dejar hacer al niño...
-Es fundamental. Y también la actitud del adulto: volver a encontrar la propia paz y el conocimiento con mucha paciencia, respeto y confianza en el propio niño, que es el que tiene las claves.

dijous, 7 d’abril del 2011

"EL EDUCADOR INFANTIL HA DE RESPETAR EL ESPACIO DE LOS PADRES" ARTICLE DE BERNARD AUCOUTURIER

Especialista. Aucouturier es presidente de la ASEFOP 


"El educador infantil ha de respetar el espacio de los padres"

El especialista en psicomotricidad valora la apuesta de la Isla por profesionalizar la educación de 0 a 3 años
B.G.C.,  Maó  19/02/2011
Bernard Aucouturier es uno de los mayores especialistas en psicomotricidad y presidente fundador de la Asociación Europea de Escuelas de Formación para la Práctica Psicomotriz (ASEFOP). Su participación en la sexta edición de las Jornadas de Educación Infantil no es casual. En Menorca  la apuesta por esta práctica ha convertido la educación de 0 a 3 años en un referente. Así lo considera Aucouturier, que asegura que el esfuerzo que se ha hecho en la Isla merece ser reconocido.

 


¿Por qué es tan importante la psicomotricidad en la educación de los niños de 0 a 6 años?
La psicomotricidad es la disciplina que estudia la relación no verbal del niño con el cuerpo y con el mundo exterior y es la calidad de esta relación la que determina la evolución del crío. Es necesario favorecer la práctica psicomotriz porque permitirá al niño expresar su mundo interior hacia el exterior. En este proceso es muy importante el juego libre y espontáneo, porque es a través de él como el niño podrá expresarlo.

¿Cuándo y cómo se empiezan a reconocer los beneficios de la práctica psicomotriz?
No se empieza a hablar de la importancia de la psicomotricidad hasta hace 40 años, cuando en Francia algunos autores comienzan a preguntarse cuál es el origen de los problemas de comportamiento de los niños si la causa no se halla en un problema neurológico.

¿Qué función tienen los juegos en la educación?
La práctica psicomotriz ayuda al niño a tener relaciones más estables en el mundo exterior.  Y los juegos son muy importantes porque el juego reasegura al niño, le permite representar lo que ha vivido con los padres, las diferentes situaciones a las que se ha enfrentado. Es un aspecto muy importante en los seis primeros años de vida.

Usted habla de la importancia de los juegos de identificación. ¿En qué consisten?
Son juegos muy importantes a partir de los tres años en los que los niños se identifican con personajes como por ejemplo cantantes, bailarinas o conductores de camión. Antes de los tres años son muy importantes los juegos de esconderse o de placeres sensoriales y motores. Actividades en las que el niño agrupa y separa, encaja, alinea, destruye y vuelve a construir. Son juegos universales que son fundamentales y que luego continúan a través de fórmulas evolucionadas como puede ser la gimnasia, por ejemplo.

Los juegos libres y espontáneos son necesarios, pero ¿qué pasa con los videojuegos, pueden perjudicar el proceso de educación del niño?
Los videojuegos pueden ser un hándicap para algunos niños porque no requieren la utilización del cuerpo. En estos juegos se trata simplemente de seguir una imagen, los niños no son parte activa. Por este motivo pueden ser un peligro para chavales inseguros. Si se sitúan de forma precoz delante de los videojuegos, se apropian de las imágenes y viven las sensaciones del rol que se representa en las imágenes. A los niños con déficit de identidad, les crea una sensación de rol, pero no de su propio rol. Y esto es muy grave.  Por otro lado, un niño seguro de sí mismo, que juega, habla, comunica y tiene el placer de ser, utiliza los videojuegos y esto no supone ningún drama en su vida.

¿Qué piensa del trabajo que se ha hecho en Menorca para poner en práctica la psicomotricidad?
Menorca ha puesto en marcha una tarea muy importante. Ha hecho un gran esfuerzo que hay que reconocer y apreciar. Hay que resaltar que aquí se ha puesto el acento en la etapa de 0 a 3 años. Si la educación en esta franja funciona, el niño tiene todas las oportunidades de continuar de forma correcta su desarrollo.  En Menorca se ha hecho el esfuerzo de profesionalizar a todas las personas que trabajan en las escuelas infantiles. Es un acierto porque intervenir en estos centros requiere profesionalidad. Los padres confían a los niños a los maestros y por tanto han de tener la seguridad de que los profesionales con los que los dejan tienen capacidad para ayudar a sus hijos. Otro aspecto importante es tener claro que el profesional ha de desarrollar su trabajo sin quitar el espacio que pertenece a los padres. 



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